Una de las actividades centrales de este esfuerzo es aumentar el acceso de las mujeres al financiamiento para el desarrollo de sus emprendimientos. La tarea no es sencilla, pues las mujeres en condición de pobreza y vulnerabilidad económica en Costa Rica tienen un limitado acceso al financiamiento, principalmente porque las instancias financieras no responden a sus necesidades particulares desde una perspectiva de género interseccional.